viernes, 30 de marzo de 2007

CÓMO ELEGIR UN NOMBRE PARA TU PROYECTO DE TITULO: LA REGLA DE ORO


¿Aún no sabes que programa hacer en título?

Existe una sola regla de oro para elegir un proyecto de título en la FAU: se debe llamar CENTRO. Da lo mismo de qué. Puede ser un "Centro de difusión", un "Centro de investigación", un "Centro educacional" o un "Centro de salud". Lo importante es que se llame "Centro".
¿No te convences? En los siguientes párrafos encontrarás una serie de ideas para tu proyecto de título, siguiendo siempre esta regla de oro. Pero recuerda: no importa qué es ni para que sirve. Importa como se llama.
Partamos por el clásico de los clásicos. Los centros de investigación son SIEMPRE muy bienvenidos en la FAU. Podrías hacer, por ejemplo, algo de trascendencia como un "Centro de investigación y documentación cordillerana" (Camplá, 2002) o un "Centro de investigaciones arqueológicas de Los Vilos" (Ortega, 2004). Una idea muy sencilla para encontrar este tipo de temas es buscar El Mercurio y leer las noticias del día. Sólo debes elegir algún asunto contingente y convertirlo en un Centro de Investigación. Por ej. Si lees: "Planta de Celulosa contamina los humedales en Valdivia"... haces un "Centro internacional de investigación de humedales de Valdivia" (Cárdenas, 2004), o si lees "Corporación Chilena de la Madera dice que el país está atrasado en tecnologías industriales", podrías hacer un "Centro de Investigación en tecnologías madereras" (Mardones, 2002). Una buena sugerencia es guardar el recorte del diario para pegarlo en tu memoria.
Sin embargo, aquí el mejor dato es elegir temas que sean ecologistas o ambientales. Eso gusta mucho, digamos que entre más verde mejor. Por ejemplo, podrías pensar en un "Centro de investigación de recursos marinos de la bahía de Mejillones" (Ortega, 2005) o un muy necesario "Centro de investigación científica, farmoquímica y farmobotánica" (Montealegre, 2004). Pero hay un secreto: entre más complicado el nombre, mejor. Piensa en cosas como un "Centro de investigación de la conservación de la diversidad bio-cultural del ecosistema valdiviano." (Eliash, 2005).
Asociados a los centros de investigación están los "Centros de difusión", que son lo mismos edificios, pero sin científicos adentro. Son una muy buena fuente de ideas, porque casi cualquier cosa sirve. Por ejemplo, podrías hacer algo tradicional como un "Centro de difusión indígena" (Montealegre, 2002); un "Centro de expresión y difusión del Arte" (Elton, 2003) o un "Centro de difusión folklórica de Chillán" (Prat, 2002). Ideas sobran, aunque hay un truco para encontrarlas. Antiguamente, era común que se hicieran "Museos". Ese nombre ya pasó de moda, pero tu puedes aprovechar esas ideas para encontrar tu título. Por ejemplo, en vez de hacer un "Museo del Cine" podrías ahora hacer el mismo edificio y ponerle un nombre contemporáneo como "Centro de difusión y conservación de las imágenes en movimiento" (Iglesis,
2004) o en vez de un "Museo del Vino", deberías ahora hacer un "Centro de difusión de la cultura vitivinícola" (Pinto, 2003).
En realidad, puedes elegir cualquier tema, por extraño o rebuscado que sea, y convertirlo en un "Centro de difusión". Por ejemplo, ¿que te parece un "Centro de difusión de la pesca artesanal sustentable en caleta Quintay" (Prat, 2005)?... suena interesantísimo. Si te gustan los perritos podrías hacer un "Centro de difusión y adiestramiento del perro" (Prat, 2003) o si quieres ir al sur, podrías tratar con un "Centro de difusión y estudio de la cultura del carbón" (Prat, 2003). Recuerda que no es relevante si el "estudio de la cultura del carbón" es una prioridad nacional o no... lo importante es que se llame "Centro".
Los Centros Culturales también son buenas ideas, pero debes pensar en nombres mas ostentosos. Aquí la gracia del edificio está en encontrar el nombre más bonito. Por ejemplo, puedes hacer un "Centro de Integración Cultural" (Camplá, 2003), un "Centro de Desarrollo Cultural" (Besancon, 2004), un "Centro de Expansión cultural" (Lobos, 2004), o uno con un nombre mas elaborado aún: "Centro de expresión del arte y la cultura" (Elton, 2003). También puedes ponerle un apellido para que quede más exclusivo, como por ejemplo, "Centro cultural para la actividad literaria de Bellavista" (Morelli, 2003) o "Centro Cultural Identitario Mapuche" (Sartori, 2003). Si aún no se te ocurre nada, y no quieres latearte investigando el tema de tu centro cultural, puedes recurrir al siempre útil "comodín universitario". ¿qué te parece el "Centro Cultural Andres Bello de la Universidad de Chile" (Barla, 2005)? ¿o el "Centro Cultural Universidad del Bio bio" (Teran, 2002)? No es muy recomendable hacerlo con universidades privadas ––no caen bien en la FAU––, a excepción, claro, del "Centro Cultural Universidad Arcis" (Ortega, 2003).
La "regla de oro" es mágica, pero hay que ser fiel a ella. Cualquier proyecto, sea lo que sea, debe cambiar su nombre por uno que empiece con "Centro": por ejemplo, un teatro debería llamarse "Centro de experimentación teatral" (Montealegre, 2004) y un consultorio de urgencia debería ser "Centro de urgencia público en la periferia de Santiago" (Munizaga, 2005). Una cárcel de menores debería llamarse "Centro de detención formativa para menores" (Elton, 2004), un gimnasio se debe llamar "Centro deportivo y recreación de Quilicura" (Eliash, 2004) y un tribunal debería ser un "Centro de Justicia de San Bernardo" (Mardones, 2003). Es sólo cuestión de ser creativo y buscar las palabras correctas. Por ejemplo, para que un hotel sea un mejor proyecto debería llamarse "Centro de equipamiento turístico" (Sartori, 2003), un consultorio podría ser "Centro de referencia de Salud de la Pincoya" (Prat, 2004) y una sede social, "Centro comunitario para el desarrollo social" (Pinto, 2004). ¡Esos son buenos nombres!.
Los edificios educacionales son bien recibidos en la FAU, pero también deben cambiar de nombre, en todas sus versiones. Por favor, que no se te ocurra llamarlos "Escuelas" o "Institutos"...¡que poco arquitectónico! Si es un edificio de tipo general, puede llamarse "Centro educacional para la comuna de Conchalí" (Eliash, 2003) o "Centro de educación integrada" (Iglesis, 2005); si es un instituto técnico debería llamarse "Centro de
capacitación técnica de Santiago" (Eliash, 2003) y si es un colegio común y corriente podría llamarse "Centro de educación media técnico profesional" (Camplá, 2004). Los jardines infantiles tampoco pueden olvidar la regla de oro y deben cambiar su nombre por uno del tipo "Centro educacional jardín infantil" (Terán, 2004). Una buena idea para que tu colegio o instituto parezca mas interesante, es complicar un poco el nombre, como por ejemplo, un "Centro socio educativo Caleta Sur de Lo Espejo" (Munizaga, 2004), un "Centro educacional y apoyo a la integración escolar" (Elton, 2004) o un "Centro de Capacitación laboral e integración social" (Camplá, 2004)... impresionan y dan buenos resultados.
No lo olvides: no importa realmente que cosa quieras hacer. Lo importante es que se llame "Centro".
¿Tu eres de aquellos que no les gusta complicarse la vida?...Seguro estás pensando en hacer un edificio simplecito, algo así como un par de salas multiuso, algunos baños y una que otra escalera. Podrías hacer, por ejemplo, un imprescindible "Centro de información del Barrio Universitario de Santiago" (Camplá, 2004), o un profundamente necesario "Centro de eventos en Isla Teja" (Iglesis, 2003). Ya sé, ya sé seguamente estás pensando que un centro de eventos es algo frívolo y ABC1... quizás tienes razón... ¡pero no todo está perdido! ¡Puedes transformarlo en algo mas cultural sólo cambiándole el nombre!... ¿que te parece un "Centro de eventos culturales de Puerto Montt" (Camplá, 2004)?
Hay quienes se quejan de lo difícil que es encontrar un tema, pero lo fantástico de la regla de oro es que CUALQUIER COSA se convierte en interesante si se llama "Centro". Por ejemplo, una forma de inspirarse es pensar que cosas te gustan... ¿la ropa? ... ok, podrías hacer un "Centro de la Moda" (Terán, 2005); ¿te gusta ir a acampar?... haz un "Centro de aprovisionamiento en Farellones" (Elton, 2003)... ¿te gusta el vino?.. que te parece un "Centro de desarrollo vitivinícola de Colchagua" (Morelli, 2004), .... ya sé, eres de esa onda alternativa de vida natural, yoga y meditación... ¡listo! Haz un "Centro de comunicaciones del hombre con la energía de la tierra" (Ortega, 2002).
¿Aun no se te ocurre nada? Mira a tu alrededor... ¿qué ves?...mmm... tus amigos en el electivo de arquería... bueno, podrías hacer un "Centro deportivo para el tiro con arco" (Pinto, 2002). Así de simple.
La regla de oro es tan poderosa que incluso puedes partir eligiendo un nombre y luego viendo para que sirve. Por ejemplo, algunos nombres de edificios extraños pero sugerentes son "Centro para la tolerancia" (Mardones, 2002), "Centro lúdico formativo creativo" (Hevia, 2004), un "Centro de Participación Ciudadana" (Montealegre, 2004) o un muy notable "Centro de Interacción cívico cultural" (Pinto, 2004) . No importa el programa de estos edificios, con un nombre así, ya tienes la mitad del 7.0 en tu bolsillo.
Ya sabes, hagas lo que hagas debes ponerle como nombre "Centro". Pero no te pases de vivo, que tratar de parecer mas complejo no resulta: la persona que hizo un "Multicentro cívico, cultural y de servicios de la comuna de Puente Alto" (Pinto, 2003) se sacó un
4.

martes, 27 de marzo de 2007

BIENVENIDOS


Esta listo el blog del taller, empiecen a publicar y a mandar ideas para salvar los proyectos!!